Bajo el nombre de Networking identificamos las soluciones de electrónica de red que se encargan de aportar a la red de datos corporativa la calidad, control y seguridad que precisan las comunicaciones de datos que circulan por ella.

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El valor de una red de datos corporativa viene dado por el nivel de servicios que podemos ofrecer sobre la misma con las máximas garantías de calidad. Las soluciones de networking son capaces de dar respuesta a los requerimientos de estas aplicaciones de valor, en aspectos tales como conmutación, acceso, ancho de banda, monitorización, redundancia… La electrónica de red es, por tanto, un elemento importante en redes de datos tradicionales pero totalmente crítico en redes de datos multiservicio. Su diseño, implantación y mantenimiento pasan a ser, por tanto, fundamentales.

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​La empresa actual precisa cada vez más conexiones de red más fiables y rápidas, no tan solo a nivel local, sino a nivel de sedes distribuidas. En este sentido, mas allá de la propia velocidad en la red, las necesidades que se le exige cubrir a la electrónica de red corporativa actual vienen dadas por el conjunto de aplicaciones y servicios que la red IP debe soportar en cualquier corporación. Aspectos como la capacidad de conmutación del tráfico, el nivel de gestión de un equipo o la seguridad y control del acceso, son críticos para corporaciones de cualquier perfil y sector que pretendan dar valor a su red IP, implantando aplicaciones como vídeo IP, telefonía IP o entornos de relación con el cliente como es un contact center. Cuando hablamos de grandes corporaciones, la criticidad de este tipo de aplicaciones es tan elevada que obliga a estas a introducir elementos de redundancia local e incluso espacial en sus equipos de electrónica. En este tipo de corporaciones hay aspectos como la eficiencia energética de los equipos que resultan de vital importancia.